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Mostrando entradas de julio, 2018

Una reflexión sobre el feminicidio

Nunca más Naturalizar la violencia. Creerse un clásico humorista insinuando que las instituciones son mujeres a las que se les baja la ropa interior y son abusadas, creer que hay motivos válidos para matar a una mujer, juzgar a partir de la utilidad o no de los cuerpos. Fragmentos de una sociedad   que se autodestruye   y carga sus dados contra lo casual y no contra lo que da origen a los hechos.   Obvia su responsabilidad en Educación sexual, su responsabilidad en la protección de la niñez, su responsabilidad en la prevención del acoso, de la educación en derechos y el cumplimiento de todas las garantías para una vida libre de violencia. A mediados de 2017 la policía registraba un total de 369 feminicidios,   en 2016 se cerraba con el registro de 524 feminicidios según medicina legal y hasta julio 11 del 2018 se registran 224 .   Cada 15 horas   una mujer es asesinada   en El Salvador. Nos hemos escandalizado en muchas ocasiones por casos sonados en el pasado como fue el de la n

Poemas de "Manual para perdonar el deseo"

Tendencia  I La soledad como cualquier otra enfermedad me tiende un puente Mitigo la música de sombras que deambulan por la luz de un hueco que olvidé cerrar La lengua se atora en una manera crepuscular de intentar el grito Por todos los vacíos y los abismos Por todos los huesos   y los ojos desorbitados Por esa palabra que no se sabe traducir a ningún idioma Y hoy es un himno al estropajo de los dioses a media tarde Espaldas que llegan tarde Piernas, efímeros retratos de una mujer que juega comerse sus entumecidas manos Grifos abiertos, gemidos Lamentos de un hombre orgiástico a quien amé como colibrí Venenos, últimas voces del tedio en los vagones imaginarios De mi tren golondrina que atraviesa membranas grises La soledad como cualquier otra estupidez recoge mis pedacitos Y se los tira a un sol imperfecto y pusilánime Y rompo la tarde Y rompo la nada con la otra nada que me devuelve al vicio Las palabras que muerden. La soledad y su perro desan